Uno x Uno: Los caprichos de la dirigencia, los responsables de la derrota

Racing hizo un digno papel ante el puntero del campeonato, pero lo pierde por la incapacidad del interino eterno que designó la dirigencia. Copetti, del representante amigo, se hizo echar a los diez minutos y Correa mejoró a Talleres… Gran nivel de Aníbal Moreno y buenos rendimientos de Lisandro, Darío, Fabricio y Rojas.

Gabriel Arias (5): Nada que hacer en los goles de Talleres, que no lo exigió mucho más.

Juan Cáceres (4): Fue en todos los tiros al ataque, pero en la mayoría decidió mal. Es vehemente en la marca y sufrió poco cuando el partido quedó 10vs10.

Nery Domínguez (5): Hoy fue primer zaguero y se mostró firme, aunque dividió mucho y no estuvo preciso en los envíos cruzados.

Leo Sigali (5): Fértoli lo sacó del partido con un pisotón, pero es el corazón de la defensa. Mostró personalidad y orgullo para resistir hasta el entretiempo.

Eugenio Mena (4,5): Parecido a Cáceres. Atacó mucho, pero no resolvió bien. En defensa debió correr para atrás seguido por la presencia de Valoyes y luego Auzqui en su espalda.

Aníbal Moreno (7): La figura de la cancha. Estuvo en todos lados, fue combativo, pasó la pelota con precisión –como siempre-. Cada partido se lo ve mejor. El único de los refuerzos traídos por la dirigencia que cumple las expectativas.

Fabricio Domínguez (6,5): De sus mejores partidos en Primera. En inferioridad numérica exigió en su sector, le sacó una roja a Fértoli, probó al arco y fue peligroso. En este nivel es una buena opción en la banda.

Lisandro López (6): El manual del líder. Un todoterreno que juega bien casi al lado del 5. Por la expulsión de Copetti debió hacer la doble función de armador-delantero. De penal hizo el 1-1. Increíble que haya salido para darle el lugar a un insignificante futbolista como Correa.

Matías Rojas (6): Se lo vio enfurecido positivamente desde el inicio, permaneció activo, la pidió y se quiso hacer cargo del equipo tanto 10vs11 como 10vs10. Buena prestación del 10.

Enzo Copetti (0): Ojalá el miembro de la dirigencia que hizo la transacción esté feliz, porque Racing no se benefició con un delantero inhábil, inofensivo e irresponsable. Se hizo echar por un codazo a los 10 minutos de partido. Debe agradecer las pocas variantes arriba, porque esto ameritaría que no juegue más.

Darío Cvitanich (6): Jugó en su hábitat y se notó. Estuvo asociativo, hizo un desgaste físico importante por tener un hombre menos y fue productivo. De un forcejeo rival común inventó un Ippon para que Racing obtuviera un penal.

Mauricio Martínez (5): No tuvo un mal ingreso (fue por Sigali en el ET). No tuvo injerencia en el gol rival y tuvo salida limpia desde atrás.

Carlos Alcaraz (5,5): Enchufado en su entrada para asociarse con Rojas y buscar espacios entre líneas. Tuvo un excelente cabezazo que dio en el travesaño. Merece más minutos.

Javier Correa (2): No se entiende su entrada por Lisandro ni que alguien en la dirigencia lo haya considerado seriamente para ser delantero de Racing. Improductivo, displicente. Su ingreso mejoró a Talleres.

Tomás Chancalay (3): Su llama goleadora parece apagarse. Entró con la cancha al revés, perdió un sinfín de pelotas y por no saber controlar no quedó mano a mano con Herrera.

Benjamín Garré (3): Si no le pone voluntad, es imposible.

Claudio Úbeda (2): Salvo Moreno –y exceptuando el cambio obligado de Martínez-, hizo todos los cambios mal sacando a los mejores del equipo. Lo partió, metió mano innecesariamente y Racing no pateó más al arco. Lovera pasó de ser de los mejores a no jugar ni un minuto. Solamente por la austeridad y desinterés de la dirigencia puede ser entrenador de un club como este. No tiene ni un pergamino para ocupar ese lugar. Hace cinco que no gana y la Academia se cae hasta de la clasificación a Sudamericana.