Perfil de Eugenio Mena: “Inteligencia táctica en la punta izquierda”

El defensor chileno llegó a Racing para pelear el puesto ante Alexis Soto. Sin embargo, Keno tiene la posibilidad de desempeñarse en los distintos lugares de la banda e, incluso, puede ser stopper. Su actualidad no es la mejor, pero confían en la experiencia del bicampeón de América.

La necesidad de sumarle competencia seria al plantel en un puesto sensible fue uno de los objetivos en el receso. Con Gonzalo Piovi fuera del nivel deseado, la búsqueda fue por un lateral izquierdo de nivel para pelear con Alexis Soto. El resultado fue la incorporación del marcador de punta chileno Eugenio Mena. Con pergaminos que avalan su categoría y un pasado de mucho éxito, la actualidad de Keno no es la mejor.

Su profundidad en ataque es su virtud más destacada: técnica muy interesante para ejecutar centros o asistencias, pisa el área por sorpresa y suele tener buenas decisiones. A pesar de esto, no puede ratificar sus buenos momentos en ofensiva con actuaciones destacadas en defensa, su punto más débil.

Oriundo de Viña del Mar, surgió de Santiago Wanderers en 2008, cuando el equipo estaba en la segunda categoría del fútbol trasandino. Fue parte importante del ascenso en 2009 y tras un buen semestre en Primera, fue transferido a Universidad de Chile. Aunque su ciclo comenzó con pocos minutos, fue una pieza vital cuando arribó Jorge Sampaoli: tanto como stopper y como lateral, fue parte clave en la consagración de la Copa Sudamericana, la semifinal de la Libertadores (cae con Boca) y el tricampeonato de los azules. Sus 132 partidos, ocho goles y cinco títulos reafirman su gran estadía en Santiago.

En la Selección de Chile también fue muy trascendente. Primero bajo el mando de Marcelo Bielsa y, luego, con Sampaoli. Formó parte del bicampeonato de América en 2015 y 2016, de las últimas tres Eliminatorias y del plantel que disputó el Mundial 2014. En la Copa del Mundo su Equipo Nacional eliminó a España en primera ronda y cayó en Cuartos contra Brasil, el anfitrión.

Desde su arribo al fútbol brasilero en 2012 comenzó, progresivamente, su declive futbolístico. Primero llegó a Santos, donde ratificó lo mostrado en la U, siendo importante, teniendo mucho rodaje (61 PJ). Tras dos temporadas fue a Cruzeiro. Ahí también fue titular en el único año que estuvo; San Pablo en 2016 abrió otro ciclo en Brasil: jugó casi el doble de partidos que en Cruzeiro (45 a 26), pero poco a poco fue perdiendo terreno y decayendo el nivel.

Sport Recife y Bahía fueron sus últimos dos clubes. De poca jerarquía y protagonismo en su liga, tuvo continuidad, pero con un nivel sensiblemente inferior al que supo mostrar. En este último, jugó mucho como volante por izquierda o como interior. Incluso llegó a ser extremo por la punta, mostrando todo su repertorio táctico y la posibilidad de adaptarse a distintos panoramas.

Mena llega a Racing con la firme decisión de ser utilizado como lateral, su puesto de origen. Tiene técnica y experiencia; recuperar su nivel dependerá mayormente de Eduardo Coudet. Pero a Alexis Soto ya le apareció un competidor con espaldas anchas.